Aceptar y asumir que existe maltrato psicológico en una relación de pareja es difícil, tanto para la persona maltratada, como para la persona que maltrata.
Cuando existe violencia física, no puede negarse, ha existido y se recuerda con claridad. Pero es más complicado ser consciente de lo que está ocurriendo cuando se trata de maltrato psicológico: nos surgen dudas o no somos capaces de verlo con la claridad suficiente.
En bastantes ocasiones antecede o acompaña al maltrato físico, pero no siempre es así. El/la maltratador/a tiene suficiente poder para anular y dominar a su pareja mediante la manipulación mental y el chantaje afectivo.
Si bien la mayoría de las personas que sufren maltrato psicológico son mujeres, no siempre es así. En nuestra experiencia hemos encontrado casos de maltrato psicológico tanto en hombres como en mujeres.
El maltrato psicológico se produce en una relación de pareja cuando uno de los miembros actúa de manera que frecuentemente:
Inicialmente, quien sufre el maltrato es incapaz de reconocerlo y, cuando se da cuenta, se encuentra sin recursos y sin fuerzas para hacer frente a la situación. En muchas ocasiones ha perdido el contacto con la familia y las amistades.
El maltratador/a, mediante la manipulación mental, transmite a la otra/o la necesidad de eliminar su libertad, su autonomía, y su derecho a tomar decisiones (incluso de aquellas que conciernen a su propia vida y a sus propios valores). Todo ello lo justifica como necesario para preservar el amor y la propia pareja.
Utiliza el chantaje afectivo para conseguir que realices cosas y cambies aspectos de tu vida por el amor que sientes, haciéndote sentir mal y forzándote a que modifiques tus ideas, creencias y amistades.
“Si realmente me quieres, tú: ____________________ » (Completa la frase tu misma/o)
Cuando un miembro de la pareja impone su voluntad de forma continuada y progresiva, tergiversando la situación desde una posición de superioridad y siempre posee la verdad y el poder, nos encontramos ante una situación clara de maltrato psicológico.
La otra persona tiene dos opciones: acatar la situación y aceptar el maltrato o salir de esta relación y recuperar una vida más sana y digna.
Se trata de una situación muy compleja y, la decisión de dejar la relación, es realmente difícil ya que la persona maltratada suele tener sentimientos amorosos (en ocasiones obsesivos) por su maltratador/a.
El apoyo de familiares y amigos es fundamental.
¿Crees que puedes ser víctima de maltrato psicológico?
O si tienes dudas sobre si tu relación es sana, amorosa y basada en el respeto, haz el Test. Te ayudará a decidir si necesitas actuar para cambiar algunas cosas y así evitar que puede ser tóxica y de maltrato.